El pasado 9 de enero algunos diabluchos participamos en el triatlón de Viña del mar.
Fue una mañana fría y con mucha neblina. Por suerte el mar estaba en calma y no muy frío.
La organización en cuanto a infraestructura, boxes y señalización fue buena, pero a pesar de todo el número de participantes eran pocos para un triatlón ITU.
Posiblemente el elevado precio de inscripción y la proximidad de 1/2 IM de Pucón, echó para atrás a más de uno.
Estos precios de inscripción están haciendo que muchos aficionados vayan seleccionando uno u otro, cuando lo divertido es participar cuanto más mejor.
Ya al llegar me llevé una sorpresa, porque me había inscrito a un triatlón en distancia olímpica y finalmente era sprint.
Otro punto que creo debería cambiar, son las excesivas categorías de edades. Están bien cuando hay muchos participantes, pero que en cada categoría haya 5 o 10 participantes sólo, quita competitividad.
A pesar de estos matices, estuvo bien, lo pasé bien, y tanto Juan Pablo como yo, obtuvimos un tercer puesto en nuestras correspondientes categorías.
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